lunes, 21 de diciembre de 2020

El verdadero día de la virgen del Tepeyac: 21 de diciembre

En 1535 de acuerdo con el Nican Mopohua, tuvieron lugar las apariciones de la virgen durante 4 días:
Del 9 al 12 de Diciembre de 1535.
¿Has oído del cambio de horario? Bueno, en México desde 1996 se cambió el horario, adelantando una hora en el verano; pero en 1583, en plena colonia, con la inquisición en su mayor despotismo le quitaron 10 días al calendario, ¡sí! 10 días! el sábado 15 de octubre de 1583 vino después del viernes 4 de octubre.




Tonantzin, la virgen de Guadalupe: Celebración mexicana que tuvo que oficializar la iglesia católica y que entre todas las advocaciones marianas se convirtió en la más importante del mundo, era una fecha para conmemorar a Tonantzin Tlalli Coatlicue durante 4 días.

Nuestra amada madre tierra, de serpientes su falda. 

No era solo una celebración religiosa, sino que tení bases astronómicas, púes desde el Tepeyac, nuestra madre tierra, da a luz al pequeño Sol, colibrí zurdo, materializada en la forma de mujer dormida: Iztacihuatl.


 

Desde el cerro florido Xochitepec, el Sol nace del Popocatepetl, y tiene mucho que ver con el nacimiento y la vestimenta del "niño Dios" 52 días después´, el 2 de febrero, que por la misma razón que el 12 de diciembre no sería 12 sino 22: el Solsticio (Cuando el Sol 4 días sale en el mismo lugar del cielo, hasta "nacer" el 24.




Las verdaderas fechas mexicanas, son el 22 de diciembre y el 12 de febrero, dividendo el año en 105 días y 260, teniendo 52 días entre una fecha y otra.




La mexicaneidad es fascinante.

Ver más:



 *(Aquí se cuenta, documento en nahuatl del siglo XVI), 

sábado, 12 de diciembre de 2020

La verdadera virgen del Tepeyac

Tonantzin tlalli Coatlicue. Cihuacoatl, Coatlicue, son algunos de los nombres de Nuestra amada Madre, la tierra, de faldas de serpientes, mujer serpiente, su falda, de estrellas. 

La real:

Fue representada en infinidad de figurillas de barro durante el postclasico, en diferentes posiciones: en "oración", con las manos abiertas, cargando un "niño" una muñeca, como sonaja.


Se representaba como mujer mexicana "azteca" con su cabello con dos mechones, con orejeras, grandes, también con un "cordón" que terminaba al igual que sus representaciones como Coatlicue o Mitlantecihuatl en cascabeles de serpiente.


Antiguos petrograbados del cerro del Tepeyac.

Se puede encontrar desde Teotihuacan hasta la Gran Tenochtitlan, e incluso de forma sincretica en la actualidad.


Los símbolos mexicanos escondidos en la Virgen de Guadalupe

El Sol, las estrellas de 8 rayos, el Ollin, el listón en la cintura de Coatlicue, la montaña o Tepetl,los quincunce. 



Existe un Ollin en su manto, el símbolo del movimiento, también un Tepetl o montaña, estrellas en su manto como las que había en el de Citlalinicue (la de la falda de estrellas), tiene un cordón en su cintura, igual que Tonantzin Tlalli Coatlicue.


OIllin y Tepetl (Movimiento y montaña)

Se adoraba a nuestra Madre tierra, que dio a luz al Sol niñito, Tonantzin Tlalli Coatlicue: Nuestra adorada madre tierra.



Virgen de Guadalupe: orígenes profundamente mexicanos y no católicos

Mexicanoa o mexicas, aztecas pues. 

 Sahagun hablo de ella en el siglo XVI diciendo: “[su] devoción es sospechosa porque en todas partes hay muchas Iglesias de Nuestra Señora y no van a ellas, y vienen de lejanas tierras a esta Tonantzin como antiguamente.”


El templo del Tepeyac, ya existía, no lo mando a construir la Virgen de Guadalupe, mas bien, lo mando re-construir:


Fray Bernardino de Sahagún escribió en 1576: “hay tres o cuatro lugares (...), que venían a ellos (...) los indígenas tenían un templo dedicado a la madre de los dioses, Tonantzin, de muy lejanas tierras. Uno de estos es aquí en México, donde está un montecillo que se llama Tepeacac, y los españoles llaman Tepeaquilla”


El sincretismo es innegable, el culto antiguo y su fama ya existía; solo fue sustituida exteriormente, pero afortunadamente, sus símbolos se escondieron a la vista de todos. 

El Sol, las estrellas de 8 rayos, el Ollin, el listón en la cintura de Coatlicue, la montaña o Tepetl,los quincunce. 

Es un triunfo de la religión antigua: 

 "Era grande el concurso de gente en estos días y todos decían 'vamos a la fiesta de Tonantzin'; y ahora que está ahí edificada la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, también la llaman Tonantzin (Nuestra madre), tomando ocasión de los predicadores que también la llaman Tonantzin. ...y vienen ahora a visitar a esta Tonantzin de muy lejos, tan lejos como de antes, la cual devoción también es sospechosa, porque en todas partes hay muchas iglesias de Nuestra Señora, y no van a ellas, y vienen de lejanas tierras a esta Tonantzin como antiguamente.

Fray Bernardino de Sahagún, Historia general de las cosas de la Nueva España, 1540-1585